Droguería central
Medio tirada en la barra del bar pidió un whisky peche y su paraguas goteaba.
- He perdido mi cuaderno verde.- Consiguió balbucear mirando la barba mal recortada del camarero.
- Mañana puedes comprar otro, no son muy caros, la verdad.- Le contestó, por decir algo.
- Ya... pero no he encontrado la tienda donde venden mis pensamientos.- El paraguas escupió la última gota.
ps:nueva entrada en in-correcta
Etiquetas: photopost
2 comentarios:
Eso fue exactamente lo que me pasó el año pasado con mi cuaderno verde. Pero me lo devolvió un mozo al día siguiente, cuando volví pálida a buscarlo. No dormí imaginando que alguien en la noche me leería las tripas. La cara de nada del mozo que sostenía mi cuaderno me decepcionó.
La culpa es del paraguas.
Saludos
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